Fue en la inauguración de la fuente de aguas danzantes de la Plaza San Martín de Orán
Lo que debía ser una fiesta de inauguración de las aguas danzantes en la plaza de Orán, con la presencia del gobernador, por poco termina en una trifulca. Se juntaron todos los manifestantes, cada uno por su lado, y al unísono putearon al gobierno.
Antes del acto informaban que las aguas danzantes bailarían al ritmo al ritmo de El Bermejo y Yo de Las Voces de Orán. Pero no todo fue una fiesta, en primer lugar porque se vio un operativo policial sin precedentes en los últimos tiempos, a pesar de ello los manifestantes no pudieron ser contenidos (o no quisieron contenerlos, afirman algunos, debido a la interna policial), y se acercaron peligrosamente al palco donde se encontraban las autoridades al grito de “Anda gato, esta es la plaza de la corrupción”, “Gobernador queremos seguridad”, “Suelten a los policías”, “No tenemos agua en el barrio” y “Lara Corrupto, andate”, los reclamos venían de todas partes, hasta un bomba de estruendo explotó bastante cerca del palco (la versión oficial dice que fue un petardito que sonó un poco fuerte) y ahí fue que las antenitas de vinil del gobernador le anunciaron la presencia del peligro, entonces apresuró el discurso y antes de que la cosa pase a mayores decidió emplear la vil retirada.
Los vecinos no contentos con esta actitud fueron por Juanma, que se parapetaba en el hotel resguardado por una considerable cantidad de policía que realizó un cordón para que la gente no siga puteando al gobernador.
Al final fue casi una fiesta, las aguas danzantes danzaron, los manifestantes putearon y el gobernador miró para otro lado.-
Cuarto Poder