El escándalo de las ternas para escalar en la justicia salteña

17/04/2017 | Revista Norte

EL GOBERNADOR URTUBEY, TARDIAMENTE, VUELVE ATRÁS UNA DECISIÓN DEL CONSEJO DE LA MAGISTRATURA Y ARMÓ UN TREMENDO LIO.

Tras el desenmascaramiento, el gobernador rechaza las ternas sospechadas de María Alejandra Gaufín y María Victoria Mosman. Alzamiento del Consejo de la Magistratura amañado por Urtubey.

Por Nolberto Guerra, columnista invitado de Revista Norte

Obligado por la prensa y la opinión pública, Urtubey reconoció que había un concurso amañado en la Justicia. Su socio y fiel servidor, Manuel Santiago Godoy, fue denostado. Los responsables de definir quiénes pueden ser ungidos jueces o camaristas fueron desautorizados por el Gobernador que rechazó las ternas del Consejo de la Magistratura. Este Consejo dice que Urtubey desconoció un dictamen de la Justicia. Algunos piensan ya en el Art. 5º de la Constitución Nacional.

Lejos de reconocer al Gobernador Urtubey como nuevo mentor comprometido en rechazar todo acto indecoroso o teñido de corruptela en cualquier ámbito de su administración, la sociedad salteña le recrimina ser el responsable directo, al haber permitido -en numerosas oportunidades anteriores- urticantes privilegios en favor de amigos o parientes y de haber accedido a nombramientos privilegiados en la administración pública provincial, cualquiera fuere el ámbito. Tarde para erigirse en justiciero, razonan; y otorgan sospechas de que Urtubey sabía y avalaba esta situación anómala que, al ser descubierta, optó ahora por desconocerla condenando lo que él mismo impulsó.

Desagradables designaciones avaladas por el Gobernador llenaron los estamentos públicos de amigos, familiares y serviles devoradores presupuestarios. No pocas veces trascendieron inocultables acomodos reflejados en Decretos gubernativos con altísimos emolumentos que designaban «protegidos» que solo servían para engordar la burocracia estatal.

Siempre se imponía, en el Poder Ejecutivo, Legislativo y Judicial, el «DICE JUANMA» que era sumisamente acatado y que -invariablemente- escondía repudiables privilegios.

Urtubey no conoce límites presupuestarios al engordar la grey de obsecuentes que día a día cantan loas a sus oídos, haciéndole creer que ya está en la cúspide presidencial. Prueba de ello son los numerosos ministros sin cartera y la enorme plantilla de salteños cobijados en la Casa de Salta en Capital Federal. En esos gastos monstruosos se va la leche que falta a los niños desnutridos.

Como pasa siempre, los «obedientes» en algún momento se sienten autorizados también a conceder privilegios. Siempre a familiares, amigos u obsecuentes. Es que están «amañados» por el Jefe que brinda el mal ejemplo, o permite el mal ejemplo. Empero, ningún Jefe tolera «cornada».

En esta ocasión Urtubey no solo pensó «yo soy el poder» sino también «yo soy la ley» y procedió en consecuencia.  Avalado por un dictamen de la Fiscal de Estado, Mónica Lionetto, el Gobernador resolvió rechazar las ternas giradas por el Consejo de la Magistratura donde se proponía a los habilitados para sus designaciones como integrantes de las Salas I, II, III, IV y V de la Cámara de Apelaciones en lo Civil y Comercial de Salta.

Molesto y altivo, desconoció y rechazó el trabajo del  Consejo de la Magistratura. A su vez ordenó  que se efectúe una nueva convocatoria a concurso.

El cuestionamiento social más duro es que a dos de las concursantes se les habría arrimado «un machete salvador». Esto es, se incorporó a prueba un caso práctico a resolver por los concursantes que coincidía con uno real ventilado en la Cámara donde éstas se desempeñan como funcionarias judiciales. En consecuencia, ya conocían los entretelones de este juicio, que es lo que en definitiva se cuestiona como «machete salvador».

Esto, sumado al parentesco de las beneficiadas María Alejandra Gaufín y María Victoria Mosman con altos miembros del Gobierno, despertó serias sospechas de privilegios que fueron objetados por los restantes concursantes.

Una de las concursantes, la valiente doctora Marcela Von Fischer, presentó un Recurso de Amparo ante la juez Mónica Mudski denunciando estos privilegios, pero le fue rechazado por Mudski. La concursante Von Fischer, entonces, recurrió a la Corte de Justicia de Salta. El Presidente de la Corte Guillermo Catalano y el Juez de Corte  Abel Cornejo ya se inhibieron. Aunque se inhiban los restantes miembros, con la composición que proceda, la Corte deberá fallar. Enojoso sería que si el Gobernador pidió nuevos concursos, producidos éstos la Corte declare «abstracto lo requerido» y se lave las manos. La sociedad necesita saber si hubo «traviesos» en este caso.

Los siempre dispuestos a acumular antecedentes ya piensan en las prescripciones del Art. 5º de nuestra Constitución Nacional. De ahí el cuidado con que debe tratarse esta delicada cuestión.

En tanto, el Presidente de la Cámara de Diputados de la Provincia Manuel Santiago Godoy, actuando como Presidente del Consejo de la Magistratura, en una actitud considerada tendenciosa, reprochable e intimidatoria, recurrió a la misma Juez Mudski solicitando se auditara la computadora de Von Fischer (funcionaria judicial). En el entendimiento de Godoy, en esa computadora también estaría inserto el «machete» alcanzado a las otras dos concursantes. Con esto, según Godoy, desaparecería el privilegio invocado. La juez rechazó el temerario pedido de Godoy, quien -al parecer- estaría acostumbrado a apretar.

Ni bien conocido el rechazo de Urtubey, Godoy convocó de urgencia a los restantes miembros del Consejo de la Magistratura. Acordaron reunirse el próximo martes para resolver pasos a seguir. El Consejo entiende que el fallo de la Juez Mudski avala todo su accionar y que el Gobernador desoyó este fallo.

Godoy, en todo momento, defendió la actuación del Consejo de la Magistratura expresando que no hubo irregularidades ni vicios en la tarea que llevaron adelante. Desafiante, dijo que la actuación del Consejo fue brillante. Ni por enterado se dio de los duros cuestionamientos de la sociedad sobre este nuevo putrefacto concurso.

Enfrentará el Consejo de la Magistratura la determinación del Gobernador? Sirve hacer nuevo concurso con las mismas reglas y los mismos actores?

LA FAVORECEDORA FAVORECIDA

No pasó desapercibido el hecho que la Dra. Cecilia Mariana Avila Ricci saliera de este concurso encabezando una terna con óptimo puntaje. Es la misma juez interina que en cuestión de horas concedió el amparo solicitado por los diputados Manuel Santiago Godoy y su hijo Lucas Godoy, para bajar de internet el documental sobre el doble crimen de las turistas francesas. Un intento de censura infructuoso ya que el film puede verse en Infobae y Perfil que lo mantienen activo.

http://www.infobae.com/sociedad/2017/02/22/este-es-el-documental-sobre-el-crimen-de-las-turistas-francesas-que-no-quieren-que-veas/

http://www.perfil.com/policia/que-muestra-el-documental-de-las-turistas-francesas-asesinadas-en-salta-que-fue-prohibido.phtml

Volviendo al fallido concurso, esta no es la primera vez que se cuestiona al Gobierno de Urtubey por privilegios que concede a sus «favoritos». En el año 2016 el Gobernador también tuvo que volver sobre sus pasos cuando pretendió designar a su amigo Pablo Robbio Saravia como Juez. La presión social lo obligó a desistir de ese cuestionado intento: Robbio era denunciado por violencia de género.

Sobre este terreno, sería saludable que el Gobernador, si realmente le interesa exponer un Gobierno no sospechado y ajustado a la ley, motorice la reapertura del famoso juicio por las turistas francesas que mucha tela a cortar dejó, llegando incluso a condenar a un inocente. Ya nadie ignora que se asignan serias responsabilidades a sectores ligados al poder. Al poder de este Gobierno provincial.

Lamentable sería que Urtubey reaccione tarde. El no puede ignorar que la Embajada de Francia, a instancias de la justicia de ese país, puede llegar hasta la Canciller Malcorra y al mismísimo Presidente Mauricio Macri presentando esta cuestión. Se entiende que primará la relación Estado a Estado. Solo reabriendo el juicio sabremos si hubo intromisión del poder político protegiendo a responsables ocultos.

URTUBEY Y SUS ANSIAS POLITICAS

Indudablemente las últimas acciones de Juan Manuel Urtubey están regidas por su angustiosa carrera a la candidatura presidencial. Nada fácil le resultará en un escenario donde debe doblegar no solo viejos dogmas, sino también viejos y nuevos caudillos. Es que un provinciano, con sólo poco más de doscientos mil votos, transpirará lágrimas de sangre para imponerse al mismo Mauricio Macri, que ya avisó que irá por ocho años; o a María Eugenia Vidal, con 3.5  millones de votos; o a la misma Intendente de La Matanza Margarita Magario, que aporta más de 1.5 millones de votos. En política nadie cede espacios gratuitamente. Y Urtubey, al final de sus mandatos, nada puede ofrecer que no ofrezcan otros con más sólida posición y en camino ascendente.

Hoy, por sus ambivalencias,  a Urtubey lo desconocen hasta los mismos «compañeros». Mas allá de fotografías de ocasión, debe mostrar liderazgo nacional. Como salteños, habrá que desearle suerte a Urtubey si logra llegar a su ansiada candidatura Presidencial.

No será fácil allanar su camino limpiando su administración de favoritismos, despejando toda sospecha de corruptela, además de mostrar auténtica gestión reduciendo los vergonzosos índices de pobreza y desnutrición. Si hasta de agua carecen los pobres.

Cuando se esconden bajo la alfombra muchas cosas sucias, hasta el mismo morador se tropieza.-

 

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