PARITARIA AZUCARERA.
Trabajadores del ingenio Rio Grande, del Departamento San Pedro (Jujuy), lograron un acuerdo paritario de 42,6% y el blanqueo de todas las cifras remunerativas.
REVISTA NORTE
Acaba de concluir, en la tarde de hoy, la paritaria del ingenio azucarero Río Grande, ubicado en la ciudad de La Mendieta en la provincia de Jujuy, alcanzando un acuerdo que lo pone en la cima de las mejores paritarias del país: un 42,6% de incremento salarial entre otros beneficios.
El Ingenio Río Grande, cuyo sistema económico-productivo incide en los poblados de La Mendieta, Palo Blanco, El Sauzal y otros del departamento San Pedro; llegó a un acuerdo luego de arduas negociaciones con el Sindicato que lidera Angel Ledesma. Hace aproximadamente un mes atrás el Gremio había diseñado un plan de lucha determinando una medida de fuerza de 96 horas progresiva, que se cumplirían un martes por 24 horas, el siguiente viernes por otras 24 horas, repitiéndose la semana siguiente un martes y viernes. Pero llegó una conciliación obligatoria de Nación que la dirigencia y la asamblea de trabajadores acató.
“Viendo lo que ha sido la caída estrepitosa del poder adquisitivo de todos los trabajadores, lo que hicimos es sincerar los números y alcanzar un acuerdo que tenga que ver con esa caída del poder adquisitivo”, explicó el Dr. Enrique Wandschneider a Revista Norte. “Llegamos a un 42,6% de incremento en el básico y a su vez el blanqueo de todas las cifras no remunerativas que ahora pasan a ser remunerativa, lo que también produce un incremento en el escalafón por antigüedad y en otros rubros que se van acumulando y que tienen incremento siempre que suban las cifras remunerativas, sino quedan estáticos. En este caso se logró que todo pase a ser remunerativo”, lo que impacta positivamente en el sueldo de los trabajadores azucareros.
“A la par, hemos logrado un premio por el día del azucarero que es el 6 de diciembre. Esto es algo innovador. Logramos que la empresa le otorgue gratuitamente a cada trabajador dos bolsas de azúcar de 50 kilos. En otros lugares se logran canastas de alimentos como en la industria alimenticia, por ejemplo. Nosotros creíamos que podía lograse para nuestros trabajadores y se logró”, dijo el abogado del Gremio.
“Se lograron también cinco permanencias y diez pases a transitorio, que estaban como eventuales; se acordó el pago de retroactivos, el aumento del pago de las becas a hijos de trabajadores, y algo que no está escrito en el acuerdo pero que tenemos que darle absoluta relevancia: y es que en el Ingenio Río Grande no hubo ni un solo despido. Hay que destacar por parte de la empresa que no se ha despedido ni un solo trabajador, lo que significó que la relación Empresa y Gremio sea un poco mejor; por más que tengamos la lucha entre capital y trabajo, esta lucha es mejor si se hace sin despidos. Distinto a todos los ingenios de la región como los de Tucumán, donde hay cualquier cantidad de despidos, como en Ledesma, Tabacal, San Isidro y La Esperanza; en el Ingenio Río Grande no hubo ningún despido”, ponderó Wandscheneider.
“Creemos, como dijo Angel Ledesma, que es el mejor acuerdo posible en este contexto. No desconocemos que hay mucho por lograr en cuanto a las condiciones de trabajo, pero en este contexto es lo mejor que pudimos lograr”, sostuvo el abogado.
El ingenio Río Grande tiene 800 trabajadores, “es un ingenio entre mediano y grande. No es un ingenio grande como lo son Tabacal, Ledesma, Concepción; pero sí es mediano-grande en el contexto de los ingenios nacionales”. Río Grande produce azúcar, tiene destilería y produce alcohol para biocombustibles.
La experiencia en esta paritaria demuestra que los ingenios de la región tienen capacidad para recomponer el nivel adquisitivo de los trabajadores y capacidad para sostener las fuentes laborales. En este sentido el Dr. Wandschneider opinó que “hay ingenios que ajustan sin necesidad de ajustar. Creo que hay empresarios que no entienden la responsabilidad social que tienen en su lugar y a la primera de cambio adoptan una decisión de manual como es despedir trabajadores, apretar a la representación sindical; y por ende, bajo estas amenazas, condenar los sueldos a aumentos que no tienen nada que ver con la realidad. Son formas de ejercer la dirección de las empresas. Yo creo que en el azúcar tenemos gente con una visión muy antigua, muy vieja, muy arcaica; y es lo que están sufriendo nuestras poblaciones en todo el norte argentino”.-
REVISTA NORTE