Un claro ejemplo del juego a dos puntas de Urtubey. Buscan salvarse a como dé lugar

26/10/2018 | Revista Norte

EL URTU DE LA UIA Y EL URTU GOBERNADOR.

Mientras José pasea por los medios hablando de las necesidades de las pymes y el mercado interno, Juan Manuel firma, vota y aplica el ajuste como un amarillo de primera línea.


REVISTA NORTE

El día después que Diputados diera media sanción a la Ley de Prespuesto 2019, que prevé un fuerte ajuste favoreciendo al pago de los intereses de la deuda, José Urtubey pide desde la UIA que parte de la plata del FMI sea destinada a la producción.

El hermano del gobernador criticó duro al gobierno. Dijo que «las pymes van a estar más complicadas», que «llegamos al Fondo por una mala planificación de la política económica», que «el Gobierno se equivoca al plantear políticas de ajuste», que «el nivel de crédito en Argentina es casi nulo”, que «estamos al borde de una emergencia Pyme» y que «la industria está en situación de vulnerabilidad». Y lo dijo a menos de un día de que su hermano mandara a votar a favor del presupuesto que garantiza la continuidad del modelo económico que el indusrial tanto critica en la TV.

No son ni tibios, simplemente embusteros.

La llegada al poder salteño de la familia U, y con ello, a la vida de los negocios; les permitió encumbrarse en puestos claves que le significaron -desde 2007 a hoy- un ascenso sin igual de la mano de la gobernación de Salta.

Juan Manuel llegó a gobernador el mismo año en que José se erigía dueño de Celulosa, la empresa offshore que lo hizo socio del dirigente del PRO en Salta y ex candidato a gobernador, Juan Collado, y de un prominente empresario norteamericano, Douglas Lee Albrecht, que tiene a su vez la multinacional apostada en la ciudad de El Galpón, la cuestionada Austin Powder.

Un conglomerado de Firmas los unen: CELULASA ARGENTINA SA, RUDACO SA, GENERACION VIRASORO SAU, FORESTADORA TAPEBICUA SA, FANAPEL,  IVIRARETA SA,  GONDWANA SA, TISSUCEL SA… solo por nombrar algunas.

El gobernador Urtubey fue el primero en garantizarle al macrismo que impusiera su política económica. El Pacto Fiscal y la peleada Reforma Previsional de 2017, el Acuerdo Fiscal de 2018 y el Presupuesto 2019, son muestra de ello. Todo esto ocurre al mismo tiempo en que el Urtubey de la UIA se pasea por cuanto medio y escenario se le otorgue para propagandizar su discurso en defensa del mercado interno, las pymes y su queja por la debacle de la política económica amarilla. En ningún caso se les cuestiona el entramado de sociedades que tejieron dentro y fuera del país desde 2007 a esta parte. Y mucho menos las offshore y la plata afuera.-

REVISTA NORTE

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