CARTA ABIERTA AL GOBERNADOR DE LA PROVINCIA
DR. JUAN MANUEL URTUBEY:
A un año de la Lucha Docente y desnuda la cruda realidad que atraviesa la Educación Pública: sueldos por debajo de la línea de la pobreza ($2.200 de Básico y $5.300 inicial de bolsillo), condiciones de prácticas pedagógicas laborales indignas, equipamiento didáctico inútil u obsoleto, capacitación docente dispar y disfuncional; crisis y deterioro integral a consecuencia de sistemáticas negaciones, hermetismos y discriminación; evidentes arrebatos, vaciamientos y ausencias de pluralidad y diversidad en la convivencia democrática para la edificación de un Instrumento Político Educativo de calidad para la calidad, inclusivo, sustentable, ecualitario y proyectivo; instrumento que debió distinguirse por generar seguridad y confianza, solidaridad y fraternidad entre gobierno educativo y los profesionales de la Educación Pública; ausencia del valor humano y sustancial, “ amor al prójimo”, que supone en Ud. inspiró y condujo lograr dos gestiones consecutivas, invocando y comprometiendo “ la esperanza”, es decir “la oportunidad cierta de hacer hoy para estar mejor mañana”, y ahora su pretendida tercera decisión:” YO elijo seguir, YO sigo con vos”; ¿seguir para qué?, ¿ para justificar su débil y triste costado de intrínsecas pobrezas: “ los Salteños somos pobres porque Salta es pobre”?, entonces, ¿ la pobreza del Sistema Educativo justifica la empobrecida condición humana del Docente!? Sin derecho ni reconocimiento, sin oportunidad al ansiado desarrollo humano profesional integrado, esté condenado ser pobre toda su vida. Si bien Ud. como cualquier ciudadano tiene el derecho de elegir y seguir donde permanecer, los Docentes le decimos: “su elección de seguir donde inmerecidamente está casi ocho años, nos hace daño, daño que trasciende en la Familia y generaciones por venir”. Nunca estuvo con la Educación Pública, con el Docente ni el Alumno; esta instancia de tratamiento salarial devela su reconocida habilidad para mentir; su persistente soberbia induce castigar maltratar y humillar a la Docencia; los excesos de su absurda irreflexión, han sido causantes de mucho dolor y sufrimiento, en algunos casos desesperación e impotencia, pero también en alguna muy particular, “una oración compartida”, “compasión por su espíritu empobrecido”.
Suponiendo sea Ud. Maestro o Profesor, único sostén de su hogar de cuatro integrantes; ¿ podrá conformar respuestas satisfactorias de alimentación, educación, vivienda ( incluyendo el alquiler de un inmueble modesto, buen estado de conservación, en un barrio periférico al macro centro), vestimenta y calzado para todas las actividades del grupo familiar, salud de rutina (sin tratamientos de alta complejidad), transporte, higiene personal e indumentarias? ¿Podrá afrontar estos rubros con $7.000, o en el mejor de los casos $8.000? Su ofrecimiento del pasado 10 de Febrero ha sido y es motivo de rechazo y gran indignación.
Señor Gobernador! La Docencia entiende que este es el momento para transformar la estructural miseria y objeto de explotación que atraviesa; consciente admite que después de esta oportunidad no habrá otra después de muchos años. La transformación con implícitas condiciones y enmiendas, direccionadas a sus apetencias electorales, lesionan la condición humana pretendiendo coaccionar al mejor estilo extorsivo.
Asuma el valor de resarcir el dolor que Ud. ha creado, el miedo y persecuciones de su autoría; reanime si es considerada la humildad entre sus valores, posecionando su autoridad, su sabia actitud reflexiva, su nombre; asignando una pizca de razón a su ponderado slogan. Aplique ahora la tan esperada mejora laboral del Docente a partir del primer día de clases del Período 2015, orientado en el orden consensuado:
Prof. Ramiro Maldonado Claure, Secretario General de DASa