Apedrean y roban a ómnibus en las autopistas tucumanas
18/01/2013 | Revista Norte
Caía la tarde y el caluroso sol se ocultaba detrás de los cerros tucumanos. Los pasajeros venían del norte adormilados en el colectivo que había salido algunas horas antes de Salta y había pasado por Rosario de la Frontera.
Era un viaje normal, aburrido. Rutinario. Faltaba poco tiempo para llegar a la Terminal.
El ómnibus circulaba por la autopista de circunvalación de San Miguel de Tucumán, haciendo el habitual rodeo para ingresar a los andenes. Pero en la autopista les esperaba una sorpresa que aterró a todos.
De pronto, una pesada y enorme piedra que cayó de uno de los puentes destrozó el grueso parabrisas. Como el colectivo avanzaba a buena velocidad, los vidrios empezaron a desparramarse por todo el vehículo, agravando el susto. El chofer optó por seguir conduciendo sin levantar el pie de acelerador, mientras lanzaba preocupadas miradas hacia ambos lados del camino.
«Son ladronzuelos que se instalan en la autopista para golpear a los vehículos. Algunos lo hacen de dañinos y salvajes, pero otros pretenden conseguir que se detengan los autos o colectivos para robarles a los pasajeros cuando se bajan a constatar los daños», comentó uno de los atribulados viajeros.
¿Nadie los denuncia?, fue la obvia pregunta. «¡Para qué! Si nadie controla los caminos tucumanos. Ir a la policía solamente signifca perder tiempo y no conseguir resultados», le respondieron.
El pasajero se hundió en su asiento, con un pañuelo se sacó algunos vidrios que estaban esparcidos por su camisa y se preguntó cuándo se producirá el primer muerto por estos ataques a los colectivos en las rutas, para que el Gobierno tucumano tome alguna medida.-
Contexto