Desvalijaron a turistas que iban de Canadá a Ushuaia. Nunca les pasó, hasta llegar a Salta

Desvalijaron a una pareja canadiense y la policía «no puede hacer mucho»

Michel y Ursi viajan desde desde hace tres años uniendo la ruta Canadá – Ushuaia, en su camioneta. Nunca les pasó nada, hasta llegar a Salta. Identificaron a sus arrebatadores pero por ahora no encuentran respuestas ni sus cosas.

A veces la inseguridad no sólo golpea a los salteños. Es el caso de Michel y Ursi Buch, una joven pareja proveniente de Canadá que arribó a Salta hace pocos días, buscando llenarse de paisajes y experiencias. Viajando desde el polo norte hasta Ushuaia, abordo de su camioneta, una Toyota modelo 93 especialmente preparada, recorrieron diferentes ciudades del continente. Todo fue lindo, hasta el jueves pasado.

Ese día, bajaron a comprar un helado en la YPF en el acceso a barrio San Francisco. Cuando regresaron a su vehículo, dos delincuentes -según les advirtieron los estacioneros- habían reventado las cerraduras de su camioneta, sustrayendoles cámaras de fotos, computadoras y otros elementos valuados en 80 mil pesos. Tal como quedó registrado en las cámaras, los ladrones huyeron en un Fiat Palio nuevo de color gris.

Tras el desafortunado episodio, la pareja canadiense se dirigió hasta la comisaría séptima, donde radicaron la denuncia incluyendo datos precisos como la patente del vehículo, esperando que todo pudiera resolverse. Al otro día regresaron a la dependencia policial para ver cómo seguía el caso. Lejos de obtener una respuesta positiva, los uniformados les dijeron que el vehículo de los delincuentes estaba registrado en zona centro y que por ello debían dirigirse hasta la comisaría 1era pera continuar con la investigación.

La odisea continuaría al momento de llegar a la comisaría ubicada en Dean Funes y Güemes, ya que ahí la fuerza policial volvería a dirigirlos hacia la 7ma (de Limache). Un constante «peloteo» es lo que sufrimos, lamentó Michel en su relato.

Por datos externos llegaron hasta la Brigada de Investigaciones donde averiguaron la titularidad del Fiat. Con el dato caliente sobre la identidad y domicilio del sustractor, fueron hasta la casa -en zona centro- y se entrevistaron con la supuesta madre del delincuente. Ella les dijo que hacía dos meses no lo veía. Este dato difiere al de los vecinos ya que aseguran que el joven vive ahí y que es un ladrón conocido y con un buen pasar (generado por elementos mal habidos).

Los Buch le contaron todo esto al encargado de la comisaría primera pero una vez más la burocracia se hizo presente. «No podemos hacer mucho» les dijeron. Desde ayer, intentan llegar a la justicia salteña para que alguien les de una explicación de porqué si saben quien les robó, no pueden detenerlo o al menos recuperar sus cosas.

«El ladrón es un pobre diablo. Averiguamos que tiene tres causas por delitos y parece que puede más que su Policía», «Es increíble que nosotros que venimos de otro lugar obtuvimos más datos que dos comisarias», remarcó tajante el turista para luego agregar que lo que más quieren en este momento es recuperar sus cosas ya que contienen el trabajo -en imágenes- de meses de viaje por Bolivia y Chile.

Michel y Ursi se quedarán al menos una semana más en Salta y están dispuestos a pagar por sus cámaras y computadoras.

Otro caso en que la delincuencia y burocracia opacan la belleza que ofrece el territorio salteño a quienes lo visitan. –

Fuente: Que Pasa Salta