INFORME
El trabajo publicado por CEPA sobre la situación de las personas mayores: En los últimos casi 4 años, se ha producido una gravísima pérdida de los derechos de los adultos mayores.
Los datos son contundentes. La jubilación mínima en octubre alcanza los $ 12.936,lo que implica un aumento de 239% entre mayo de 2015 y dicho mes, mientras que la inflación de los medicamentos en el mismo período alcanzó 457%, e incluso, con la cobertura de PAMI, el aumento asciende a 297%.
Estos datos son de particular significación dado que, según las proyecciones de INDEC, para el año 2019 los habitantes de nuestro país mayores de 60 años alcanzan los 6.983.377 casos(15,5%), siendo 43% varones y 57%mujeres.
Pero más grave aún es el aumento de medicamentos esenciales utilizados para enfermedades cardiovasculares, que han sufrido un ascenso sideral, como el Sintrom, cuyo incremento de precio alcanzó 1.248% y 475% en caso de cobertura PAMI.
A esto se le suma el hecho de que PAMI modificó la Resolución 005 dejando de entregar la medicación crónica gratuita a los 2 millones de afiliados y para acceder a la misma se exige cumplir una serie de requisitos demasiados restrictivos. Esta situación trae como consecuencia que las personas mayores dejen de consumir su medicación o lo hagan de manera limitada para generar un ahorro económico en los gastos que estos demandan.
Evolución de la jubilación mínima
La reforma previsional de diciembre del año 2017 tuvo un fuerte impacto en la evolución de los haberes jubilatorios y del conjunto del sistema previsional. En el año 2018 y lo que va del 2019, la situación fue particularmente negativa para los adultos mayores. Por ejemplo, el aumento de la jubilación mínima en el primer año luego de la reforma previsional fue sólo de 28,4% (comparando el periodo ene18/ene19), en contraste con la evolución de la inflación acumulada de 2018, que alcanzó el 47,6%.
Esta situación es crítica dado que, según el CEPA, el poder adquisitivo de la jubilación mínima se retrajo 23,4% si se compara el período septiembre de 2015 a septiembre de 2019. La estimación a diciembre de 2019 en relación al mismo mes de 2015, considerando las proyecciones del REM BCRA y el aumento previsto para fin de año, alcanza una caída similar.
Sin embargo, esta medición no considera la canasta de consumo de las personas mayores en particular. Este grupo etario tiene gastos que otros grupos no tienen. Un ejemplo es la importante erogación en medicamentos que dado los aumentos y la no cobertura de PAMI afecta el bolsillo de las personas mayores. También la tardanza en la entrega de turnos médicos o estudios complementarios, hacen que deban acudir a la medicina privada asumiendo sus costos. Adicionalmente, se ven afectados por la falta de entrega de ayudas técnicas como bastones, sillas de ruedas, bolsas de colostomía, etc. donde los costos se dispararon de manera exponencial, como, por ejemplo, una silla de ruedas motorizada costaba $22.748 hoy cuesta $116.764 (413% de aumento del 2015 a la fecha), o un andador plegable de aluminio que costaba $1.060 en el 2015, y hoy cuesta $3.706. Por otra parte, hay que tener en cuenta los gastos en transporte dado que si bien la tarjeta sube tiene descuentos, las personas mayores en muchos casos deben utilizar taxis o remis por la disminución en la movilidad física. También hay que incluir los servicios especializados como los cuidadores domiciliarios que no son cubiertos por casi ninguna Obra Social, y la alimentación terapéutica que tiene costos mayores que una dieta normal, tales como la utilización de proteínas de alta absorción y rendimiento, dietas antihipertensivas, o específicas para personas con diabetes entreotras. Teniendo en cuenta estas dimensiones la Defensoría de la Tercera Edad calcula un costo de la Canasta para Personas Mayores de $30.524, por lo tanto, el 60% de los jubilados que son los que cobran la mínima son pobres.La propuesta del gobierno ha sido reemplazar progresivamente la jubilación por una pensión universal de los adultos mayores (por sus siglas, PUAM) de menor cuantía (80% de la jubilación mínima) donde las mujeres podrán acceder recién a los 65 años y no a los 60 como en la moratoria. Si realizamos el mismo cálculo en relación a la línea de pobreza, es posible distinguir que, si la PUAM representaba un valor 0,2% mayor a la línea de pobreza individual en marzo de 2018, en la actualidad (octubre de 2019) ha caído 12% por debajo de dicho límite. El valor actual de la PUAM es de $10.350 y la Canasta para un adulto es de $11.710 aproximadamente.
La trampa de la Prorroga de la Moratoria
Si bien la situación actual es grave, será aún peor dado que la prórroga de la moratoria jubilatoria para las mujeres (la de los varones ya culmino), encierra una trampa que deja a ciento de miles de mujeres afuera del sistema previsional. Si bien se prorroga es hasta el 23 de julio del 2022, la fecha de corte sigue siendo el 2003 y es lo que deja a miles de mujeres fuera de la prórroga. Recordemos que los dos requisitos para que una mujer pueda jubilarse en nuestro sistema es tener 60 años de edad y 30 años de aporte.
Una mujer hoy (2019) que cumple 60 años debió haber nacido en 1959. Los 30 años de aportes que la mujer debe compara debe considerarse una vez cumplido los 18 años que es la edad de comienzo en la vida laboral. Para el caso, los 18 años fueron cumplidos en 1977 (1959+18=1977). Recodemos que las mujeres compran los años de aportes y que le son descontados de los haberes previsionales mediante cuotas. Una vez cumplido los 18 años se debe sumar los 30 años de aportes, con lo cual una mujer nacida en 1959 llega a los 30 años recién en el año 2007. Por lo tanto, como el corte es hasta el 2003, las mujeres solo pueden comparar 26 años. ¿Entonces que pasa con los 4 años que faltan? No los puede comprar, debe presentar documentación sobre un trabajo formal. Las Amas de Casa cuyo trabajo no es formal ni es remunerado y las mujeres que lo hacen en el mercado informal (son la gran mayoría) quedan afuera de la moratoria. ¿Y en el 2022? Para acceder a la moratoria las mujeres deberán tener 7 años de trabajo formal, sino no podrán acceder a la moratoria.
Jubilación en dólares
Si analizamos la evolución de la jubilación en dólares, la pérdida es significativa: la jubilación actual implica la reducción de casi la mitad del promedio de la jubilación mínima en dólares en 2015.
Comparación entre la evolución de la jubilación mínima y de los medicamentos
Mientras que la jubilación aumento un 239% los medicamentos aumentaron un 457%, el Precio de Venta al Público (PVP) y los que presentan cobertura de PAMI aumentaron un 297%, con el agravante de la suba abrupta después de la disparada del dólar a $65 en los últimos días. Vale recordar que el PAMI cubre la demanda de 4.410.000 personas de más de 60 años, habiendo en la Argentina cerca de 7 millones de adultos mayores (Indec proyecciones).
Pero más grave aún es el aumento de medicamentos esenciales utilizados para enfermedades cardiovasculares que han visto un ascenso sideral como el Sintrom con un aumento de precio de 1.248%y 475% en caso de cobertura PAMI, oel Atenolol que aumentó un 1.026% de incremento en el PVP y un 563%de aumento del PAP. A esto se le suma el hecho de que PAMI modificó la Resolución 005 dejando de entregar la medicación crónica gratuita a los 2 millones de afiliados y para acceder a la misma se exige cumplir una serie de requisitos demasiados restrictivos. Esta situación trae como consecuencia que las personas mayores dejen de consumir su medicación o lo hagan de manera limitada para generar un ahorro económico en los gastos que estosdemandan.
Como se observa en la tabla N°1, en promedio los precios de los 50 principales medicamentos de septiembre a octubre se incrementaron 8,7 % y 6,7% para afiliado de PAMI. El incremento inflacionario para los 10 medicamentos que más aumentaron en el último mes alcanza el 15,7% (tabla N° 2), con medicamentos que se incrementaron hasta un 21,9% sólo en el mes de octubre.
Queremos destacar que después del 11 de agosto los precios de los medicamentos se dispararon por la corrida bancaria que llevo al dólar a 60$ a tal punto que hubo medicamentos que aumentaron un 20%.
El aumento inflacionario de los medicamentos sumado a la quita de la entrega gratuita por parte de PAMI deja a las personas mayores en situación de gran fragilidad, donde es muy probable que la morbi- mortalidad aumente en los próximos años debido a estas causas. El mayor consumo de fármacos por parte de este grupo etario es el de la medicación para enfermedades crónicas tales como cardiopatías, diabetes, hipertensión arterial, osteoporosis, etc.
A nivel mundial las enfermedades crónicas no transmisibles son responsables del 85% de todas las muertes en el mundo. En el 2008 las defunciones por enfermedades crónicas sumaron 36 millones y seespera que para el año 2030 las muertes por esta causa ascenderán a 55 millones a nivel mundial (OMS 2012). Se prevé que el número anual de muertes debidas a enfermedades cardiovasculares aumente de 17 millones en 2008 a 25 millones en 2030, y que las debidas al cáncer asciendan de 7,6 millones a 13 millones (OMS 2012). En referencia a la región latinoamericana y caribeña (Cuba, Uruguay, Chile y Argentina), se observa que en los países con transición demográfica avanzada las muertes por enfermedades crónico-degenerativas aumentaron un 80% (CEPAL2012).
En Argentina las Enfermedades Crónicas No Transmisibles constituyeron más del 70% de las muertes en el año 2013 (Informe de Estadísticas Vitales, Ministerio de Salud de la Nación2). Dentro de este grupo, las enfermedades cardiovasculares representan la principal causa para la población general (40,2%). En el 2017 del total de defunciones (341.688) el 73% correspondieron a personas de 65 años y más (Informe de Estadísticas Vitales del Ministerio de Salud de la Nación). El 32% de las defunciones de personas de 65 años y más correspondieron al aparato circulatorio, el 16% a tumores y el 22% a enfermedades del sistema respiratorio. Solo el 5,5% de las muertes fueron por causas de enfermedades infecciosas y parasitarias. Es por todo esto que la accesibilidad a la medicación crónica resulta primordial para no solo disminuir la mortalidad sino también para promover la calidad de vida en la vejez disminuyendo el impacto de las discapacidades generadas por la falta de tratamiento oportuno.
El cuidado de la salud para estas patologías hoy resulta sumamente costoso. Citamos algunos ejemplos:
PA de IOMA: $ 351,95
PA de IOMA $ 312,66
PA de IOMA $ 1.327,56
PA de IOMA $514
PA de IOMA $ 291,2
Los tratamientos para personas asmáticas o con Enfermedades Obstructivas Crónicas (EPOC) se han visto fuertemente encarecidos. Es importante considerar que el EPOC representan el 13% de las defunciones por enfermedades respiratorias.
PA de IOMA $ 389,01
Las acidas son un problema grave de las personas mayores dado que conllevan el riego de fracturarse. En la Encuesta de Calidad De Vida (INDEC 2012) el 32% de las personas de 60 años y más encuestadas refirió haber sufrido una caída en los últimos 2 años, y el 56% se cayó más de una vez. Mas grave aún es para las mujeres, del total de caídas el 40% corresponden a ellas. A medida que se avanza en edad aumenta la prevalencia, en las personas de 75 años y más donde el 45% sufrió una caída. Las caídas traen consigo las facturas de cadera sobre todo en las mujeres porque de 4 cuatro mujeres mayores 2 presentan osteopenia y una osteoporosis. La gravedad de estas fracturas no es solo en la perdida de funcionalidad, sino que durante el año de producirse la mortalidad es de un 20% (OPS). Por ello el aumento de la medicación osteoarticular que previene las fracturas pone en peligro la salud de las personas mayores.
PA de IOMA $ 1666,47
PA de IOMA $ 1.265,85
PA de IOMA $ 620,71 (sin cobertura)
PA de IOMA $ 769,75 (sin cobertura)
PA de IOMA $ 578,4
PA de IOMA $ 236,47
PA de IOMA $ 530,37
PA de IOMA $ 1155,43
PA de IOMA $ 618,33
PAP de IOMA $ 856,03
Paraelanálisisdelosaumentossufridosporlosmedicamentosporunidad se debe sumar que la mayoría de las personas de 60 años y más consumen en promedio entre 4-8 medicamentos, lo que haceinevitable el impacto negativo en su economía y por ende en su salud. Esta situación es sumamente preocupante, no sólo porque la imposibilidad del acceso a los medicamentos aumenta la mortalidad, sino porque además aumentan la morbilidad de patologías que generan dependencia y discapacidad, como lo es la concurrencia de un ACV con hemiplejía, consecuencia de la falta de un tratamiento antihipertensivo adecuado y oportuno. La situación de salud que atraviesan las personas mayores hoy es grave. En suma, la calidad de vida de toda población mayor se ve muy afectada y los peligros del aumento de morbi-mortalidad soninminentes.
La provincia de Buenos Aires es una provincia envejecida con una alta proporción de personas mayores. Según las Proyección del INDEC, al 2019 cuenta con 2.789.599 personas de 60 años y más, lo que representa un 16% de su población total (17.370.144). Este porcentaje está por encima del de la población total de Argentina que corresponde al 15,5%. Esto es debido a dos causas fundamentales por un lado al aumento de la Esperanza de Vida y por otro la baja de la Tasa de Fecundidad. Su esperanza de vida está llegando a casi 75 años en el 2020 para los varones y más de 81 años para las mujeres.
A pesar que los avances en calidad de vida de entre los años 2003 y 2015 fueron significativos, encontramos un franco deterioro en las condiciones de vida de las personas mayores bonaerenses, dado la pérdida del poder adquisitivo de las jubilaciones, el impacto inflacionario de los alimentos y medicamentos y los tarifazos de gas luz y agua, producidos en los últimos 3 años y medios.
La provincia tiene escaso programa e instituciones que atiendan a las personas mayores. La Obra Social provincial es el IOMA el cual brinda atención médica, pero no especializada, y medicamentos a un costo muy elevado. El IPS que administras las magras jubilaciones, y el Ministerio de Desarrollo Social que debería brindar prestaciones como las de Cuidados en Domicilio, cobertura en Centros de Días y Residencias de Larga Estadía, las cuales son absolutamente inexistentes. Las personas mayores hoy en la provincia están a la buena de Dios. El acceso a los medicamentos es prácticamente imposible.
El Costo de los Medicamentos esenciales para las personas mayores de IOMA es muy superior al de PAMI, y en varios casos ni siquiera cubre el piso mínimo establecido normativamente.
Por ejemplo, el Atlansil (Amiodarona) que se utiliza para el tratamiento de arritmias le cuesta al afiliado $534,91, el IOMA sólo le cubre el 53,9% del valor total.
Como se mencionó anteriormente la principal causa de muerte en las personas mayores son las patologías cardiovasculares, siendo la hipertensión arterial una de las de mayor prevalencia. Una de la medicación utilizada para su tratamiento es el Atenolol que IOMA solo cubre el 69,5% de su valor debiendo el afiliado pagar de su bolsillo el 30,5% de la medicación.
Pero aún es el caso de los diuréticos, vemos en la placa que la Furosemida es cubierta por IOMA solo en un 46,53%.
Las personas que padecen arritmias cardiacas además de tratarse con antiarrítmicos necesitan en muchos casos utilizar anticoagulantes. Para el caso del Sintrom la cobertura IOMA es del 53,21%. La no medicación en estos pacientes produce un riesgo elevado de padecer Accidentes Cerebro Vasculares.
En el caso de la medicación para el Hipotiroidismo la cobertura es del 56,8%.
Una persona mayor que tiene IOMA debe gastar en medicamentos en promedio entre un 30% de jubilación. Tomemos en cuenta que las personas mayores consumen entre 4 y 8 medicamentos mensuales.
Sobre este informe
Autores: Mónica Roqué, presidenta de la Asociación Latinoamericana de Gerontología Comunitaria; Federico De Marziani, Presidente de Centro de Estudios Políticos para Personas Mayores; Hernán Letcher y Julia Strada, Centro de Economía Política Argentina.
Equipo técnico: Marina Valderrama, Christian Arias, Lucia Carnelli, Sebastián Amaro, Paula Nolli, Carolina Tapia, Roberto Guaresti, Jimena Ramírez, Analía Branca, Macarena Villajuan, Victoria Lorenzo, Luciana Rizzi, Juan Larreguy.