El nuevo Papa defiende los derechos de los trabajadores

LEÓN XIV 

«Tomé mi nombre por León XIII quien afrontó la defensa de la dignidad, la justicia y el trabajo».

El legado de Francisco

En su primer encuentro con los cardenales, el papa León XIV explicó que eligió su nombre en homenaje a León XIII y reivindicó el legado de la Doctrina Social de la Iglesia ante los desafíos de la inteligencia artificial entendiéndola como una nueva revolución productiva abogando por una continuidad con el Concilio Vaticano II y el pontificado de Francisco.

Así, el papa León XIV fundamentó que tomó ese nombre pontificio como una suerte de homenaje a León XIII.

«Con la Rerum Novarum afrontó la cuestión social en la primera revolución industrial. Hoy la Iglesia debe responder a otra revolución industrial y al desarrollo de la inteligencia artificial», consideró.

También solicitó a los cardenales que lo apoyen en este camino que acaba de comenzar “siguiendo el Concilio y recogiendo el legado de Francisco”.

León XIV pronunció el citado discurso este sábado en su primer encuentro con los cardenales, en una reunión a puerta cerrada en el Aula del Sínodo.

León XIII «afrontó la cuestión social en el contexto de la primera gran revolución industrial» a finales del siglo XIX con la histórica encíclica Rerum Novarum, recuerda el sitio Vatican News.

«Hoy la Iglesia ofrece a todos su patrimonio de doctrina social para responder a otra revolución industrial y a los desarrollos de la inteligencia artificial que comportan nuevos desafíos en la defensa de la dignidad humana, de la justicia y el trabajo», comentó León XIV.

Apuntó además que «esta decisión de León XIII es un puente entre el pasado y el presente».

«Verdad, justicia, paz y fraternidad son los principios del Evangelio que siempre han animado e inspirado la vida y la obra de la familia de Dios», señaló.

Pidió también «adhesión permanente a la estela del Concilio Vaticano II».

Así, aclaró Vatican News, el Papa recoge el fuerte legado del Papa Francisco; quien «recordó y actualizó magistralmente los contenidos de aquella histórica asamblea en la Exhortación Apostólica Evangelii gaudium».