Donde gobierna Lara Gros, todos creen que pueden hacer como él. Se corre la línea de lo malo, de lo prohibido… por su mal ejemplo. Por eso, algo que parece insólito, en Orán ocurre como si fuera normal.
Una empresa de telefonía intentó violar la ley instalando una antena que buscaban camuflar con hojas y tronco de palmera artificiales para evitar que se la viera. La estructura de hierro de al menos 30 metros de altura fue instalada hace una semana en el radio del macrocentro de la ciudad, lugar donde está completamente prohibido por el código de planeamiento urbano. La instalaron en terrenos del cementerio privado Parque.
Según Planeamiento de la Municipalidad, la empresa de telefonía no cuenta con el permiso de instalación correspondiente, por lo que se habría solicitado oficialmente su clausura; pero el Concejal Sanguino desmintió la versión oficial y dijo que había un permiso solicitado, por lo cual la municipalidad tenía pleno conocimiento de lo que ocurría. Por otro lado, una obra de tanta envergadura en un lugar tan concurrido, es casi imposible que nadie se percatara de ello.
Las explicaciones de los funcionarios de Lara Gros dadas desde la Secretaría de Planeamiento incurrieron en otra contradicción. Ellos ya habían sido advertidos de otra antena en la misma situación irregular y nada se hizo al respecto, a pesar de la gran preocupación y queja de los vecinos, de un pedido de informe del Concejal Sanguino y a pesar de no ser la única que viola la Ley.
La antena ubicada en calle Moreno al 800, al momento de su instalación, fue repudiada por los vecinos, lo que motivó una solicitud de informe al intendente por parte del concejal Sanguino, pero la obra no se paró, al contrario, se continuó y concluyó a los ojos de todos los oranenses y con la necesaria connivencia del intendente.
Otra antena similar se erigió en el Barrio San Francisco en calles Moro Díaz y Uriburu, e intenta ser disimulada con un tanque de agua. Allí los vecinos cuentan que se ve actualmente a operarios trabajando en el lugar.
La antena del cementerio sería ya la tercera en cuestión. Todas estas obras están altamente cuestionadas por el riesgo de contaminación, que produciría hasta cáncer en la población humana. Por ello en casi todo el mundo se dispuso que fueran emplazadas a una distancia considerable fuera de la ciudad y de zonas pobladas, algo que la ambición de dinero de Lara Gros pasa por alto.-
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