La Secretaría de Seguridad Social informó que la Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables (Ripte) de noviembre cayó 13,2% interanual en términos reales.
La Secretaría de Seguridad Social informó que la Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables (Ripte) de noviembre cayó 13,2% interanual en términos reales. Así, con los próximos datos de diciembre, 2018 cerrará con la mayor pérdida de poder adquisitivo desde 2002 y las proyecciones para este año también son negativas. Además, las consultoras descartan una recuperación del consumo en la previa de las elecciones, lo que también complicará la salida de la recesión.
El índice Ripte de noviembre mostró que el sueldo promedio fue de $33.733 brutos, lo que significó una suba nominal del 28,9% pero un derrumbe real del 13,2%. Según los especialistas, el indicador anticipa los datos del SIPA, que hoy publicará Trabajo, y del Indec, que se conocerán mañana. Las mediciones privadas, como la del IET, señalan que en diciembre la caída fue similar (13,4%) por lo que el año cerró con el mayor deterioro salarial desde la salida de la convertibilidad. Y en lo que va del mandato de Mauricio Macri, el desplome llega al 17,3%.
«Es la variable sobre la cual tenemos más incertidumbre. Una esperaría que los sindicatos intenten no sólo mantener el poder adquisitivo sino recuperar parte de la pérdida del año pasado. No obstante, el contexto es muy complejo: hay recesión, hay pérdida de puestos. Y también creemos que la inflación esperada por el gobierno está subestimada. Así que es posible que haya una nueva caída del poder adquisitivo. Si no hay un nuevo salto del dólar, esa pérdida debería ser mucho menor que la del año pasado», explicó Mara Ruiz Malec, analista del Instituto de Trabajo y Economía de la Fundación Germán Abdala (Itega).
Un informe que publicó ayer el Itega advirtió que esa situación, sumada al retraso en la desaceleración de la inflación y a las altas tasas de interés, pone «serias trabas» a la recuperación del consumo, que de acuerdo a sus mediciones cayó 8% interanual en el cuarto trimestre. Para 2019, el centro de estudios apuntó: «En un contexto de continuidad de suba de tarifas, pérdida de dinamismo del mercado de trabajo y un exigente ajuste del gasto público, no será posible compensar el arrastre estadístico de la baja del consumo, estimado en 5%».-
APU