Ana Gorostidi / Rebelión Cheap food, high wage –pan barato y salarios altos-. Éstas eran las bondades con las que los entusiastas impulsores del tratado de libre cambio de cereales, y de otras materias primas, entre Inglaterra y Francia intentaban ganarse la aprobación de los trabajadores allá por 1848. Hoy en día, casi 170 años […]