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Alfonsín asumiría un alto cargo en el gobierno de Alberto Fernández
El dirigente radical contó que mantiene diálogo con el espacio de Alberto y trascendió que suena como el nuevo titular de la Oficina Anticorrupción si ganan los Fernández.
Ricardo Alfonsín es un confeso votante de la fórmula de Alberto Fernandez y Cristina Fernandez de Kirchner. Ya había manifestado que para él la elección está cerrada y «Cambiemos va a perder». Ahora trascendió su acercamiento a Alberto y su disposición para conformar el equipo de funcionarios en la nueva gestión: «Puedo ser útil en un gobierno de Alberto Fernández», dijo Alfonsín.
A pesar de que se publicó que en el casi seguro gobierno de Alberto, Alfonsín asumiría en la Oficina Anticorrupción, el hijo del ex presidente radical lo negó: «No me han ofrecido ser titular de la Oficina Anticorrupción en un posible gobierno de Alberto Fernández. Creo que yo soy mucho más útil en el llano», dijo Ricardo Alfonsín.
En diálogo con FM Futurock sostuvo: «Yo no tengo problema en reconocer que me junto con Alberto Fernandez, a diferencia de otros radicales que no pueden decir con quiénes se juntan». «Con Alberto Fernández nos vamos a reunir después de la campaña». «Creo que puedo ser útil desde el llano en un posible gobierno de Alberto Fernández, va a hacer falta una oposición responsable», dijo.
En el portal de noticias LPO el título fue contundente: «Alberto intensifica los contactos con Alfonsín que suena para la Oficina Anticorrupción», publicaron hace unos días. «El dirigente radical mantiene diálogo con el peronismo que lo tienta como reemplazo de Laura Alonso» aseguró la publicación.
La nota del periodista Fabricio Navone:
«Tras la debacle de Cambiemos, Ricardo Alfonsín busca recomponer el partido radical, alejarlo del nicho conservador que significó la alianza con el PRO y volver a ubicarlo dentro del progresismo.
En ese sentido, según confirmaron fuentes de la UCR porteña a este portal, el hijo del ex presidente mantiene contactos con el albertismo y durante este año no ha tenido inconvenientes en mostrarse con dirigentes kirchneristas.
De hecho, según pudo saber LPO, el contacto del peronismo con radicales no solo pasa por las agrupaciones alfonsinistas que ya venían trabajando durante el gobierno de Cristina; como Los Irrompibles, de Leandro Santoro, o FORJA de Gustavo López, sino también con dirigentes históricos como Freddy Storani y el mismo Ricardo Alfonsín.
En ese sentido, los «radicales alfonsinistas» vienen militando la fórmula Fernández-Fernández en Capital Federal como la cena que realizaron en el salón Lalín de calle Moreno bajo el lema «Ahora Alberto», y compararon la elección del próximo 27 de octubre con la del retorno de la democracia:
«Los que en 1983 creíamos que la elección en ese momento definía la futura construcción de una democracia para siempre, hoy sabemos que en esta elección del 27 de octubre decidimos una Patria para Todxs», difundió en ese momento Gustavo López, presidente de FORJA.
Por el lado de Alberto Fernández, contar con una figura opositora como la de Ricardo Alfonsín en la Oficina Anticorrupción marcaría un contraste significativo con la gestión de la ultra oficialista Laura Alonso.
En primer lugar, el radical es abogado, una condición sine qua non para ocupar ese cargo que Macri debió enmendar a través de un decreto para ubicar a Alonso. Además, Alfonsín cuenta con un capital simbólico muy representativo que le garantizaría ese diferencial que busca Alberto respecto a la década kirchnerista: «volveremos distintos», repite.
En el radicalismo reconocen que hay diálogos entre el dirigente y el entorno de Fernández y en los espacios progresistas del interior del país saludan entusiasmados el viraje hacia la centroizquierda que impulsa Alfonsín.
Es el caso del radicalismo santafesino donde la mayoría priorizó los acuerdos con el socialismo y los que se fueron a Cambiemos, ahora transitan la elección de autoridades partidarias en un marco de unidad entre todos los sectores.
Dentro del progresismo, por lo bajo aseguran que no van a votar a Macri y consultados ante la posibilidad de que Alfonsín ocupe la Oficina Anticorrupción, destacan que la misma esté en manos de un opositor, radical, de corte progresista.
Además, comentan en off, que la llegada de Alfonsín al organismo de control podría servir para cortar el acceso a los pasillos del Poder Judicial a encumbrados dirigentes radicales de tinte conservador.
Por ahora, en el entorno de Alfonsín negaron que haya alguna propuesta en ese sentido: «no se reunió nunca con Alberto Fernández», respondieron a LPO».-
