INFORME
La recesión no da tregua. Las discusiones en torno al control del proceso inflacionario. Las regulaciones cambiarias. La dolarización de la economía. El déficit de la cuenta corriente del balance cambiario. Aumento de la desocupados y pérdida del salario real de los trabajadores. El informe del CIFRA.
El programa económico del gobierno está inmerso en un debate “a cielo abierto” entre los economistas del establishment en torno a la focalización de la política económica en el control del proceso inflacionario en el corto plazo dejando de lado, por el momento, la búsqueda de eliminar las regulaciones cambiarias y avanzar hacia la dolarización de la economía.
Esto pone de relieve la importante fragilidad del sector externo derivada de la crisis de la deuda que sigue latente en la economía argentina y que la fuerte devaluación y recesión que impuso este gobierno no alcanzaron a resolver. Pese a las apariencias vinculadas al actual “veranito financiero”, en el bienio junio-julio se constató el inicio del déficit de la cuenta corriente del balance cambiario (-220 y -1.670 millones de dólares, respectivamente), en el marco de una evidente apreciación cambiaria y de la tendencia a la caída de las reservas internacionales. Si bien los ingresos por el blanqueo de capitales pueden disimular en el corto plazo esta tendencia, la perspectiva es a que se profundice si se considera que: 1) el calendario de pagos de las importaciones se acrecienta en los próximos meses por la deuda contraída al comienzo del mandato, 2) la reducción del impuesto PAIS junto a la apreciación cambiaria abaratan los bienes importados, y 3) los mencionados vencimientos de la deuda en moneda extranjera no son desdeñables en lo que resta del año (casi 3.000 millones de dólares) y aumentan significativamente en 2025 hasta alcanzar a 17.500 millones de dólares.
Mientras tanto, la recesión no da tregua. Si se excluye al sector agropecuario, la actividad económica se contrajo en junio 9,0% interanual, la más alta de la era Milei con la excepción de la de marzo (-9,7%), en el marco de una fuerte caída del consumo y la inversión (-9,2% y -30,3% entre el tercer trimestre de 2023 y el segundo de 2024). En ese marco, durante el gobierno de Milei se registró un aumento 450 mil desocupados y el salario real de los trabajadores registrados cayó casi 10%. La recesión se torna un elemento clave para la sostenibilidad del programa tanto por sus efectos para contener la inflación (que igualmente se estaciona en el 4% mensual con impulso de los “no transables”) como para reducir la demanda de divisas por importaciones. En la mencionada conferencia Arriazu le enrostró a los grandes empresarios –cuya rentabilidad se mantuvo elevada en el segundo trimestre– que la caída del producto : “es exactamente el programa, es exactamente lo que pidieron”. Sin embargo, no debe omitirse que cuando el desempleo masivo coincide con la reducción salarial históricamente se tienden a agravar los conflictos entre el capital y el trabajo, otro posible factor de insostenibilidad con el que tendrá que lidiar el gobierno.
EL INFORME COMPLETO:
Informe-de-coyuntura-CIFRA_44 SEPT-2024