La Iglesia acusa al gobierno de que hizo «poco y nada» contra el narcotráfico, la trata y las adicciones

23/04/2015 | Revista Norte

cupula de la iglesia

 

CONFERENCIA EPISCOPAL ARGENTINA

Avanzan la droga y el narcotráfico, según la Iglesia

   Los obispos denuncian la ausencia del Estado.

La Iglesia renovó su preocupación por el aumento del consumo de estupefacientes y el avance del narcotráfico en el país, y denunció la situación que padecen las personas detenidas en cárceles.

El centenar de obispos que participa de la 109ª Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal Argentina, que hasta el sábado se desarrolla en la casa de ejercicios El Cenáculo-La Montonera, de Pilar, subrayó también la necesidad de acompañar las nuevas realidades familiares, entre otras problemáticas mundiales.

“Preocupan el aumento del narcotráfico y las adicciones, y la situación infrahumana de las personas privadas de la libertad en las cárceles y comisarías. Sigue muy presente la reflexión sobre el acompañamiento pastoral de las familias”, sintetizó el obispo auxiliar de Santiago del Estero, monseñor Ariel Torrado Mosconi.

La Iglesia viene alertando en los últimos años sobre el avance del narcotráfico: en marzo el Papa generó una polémica al deslizar que cree que la Argentina dejó de ser un lugar de paso de la droga para transformarse en uno en el que “se fabrica”, aunque el Gobierno aseguró que se “está lejos” de la producción de estupefacientes.

En 2013 difundió un documento en el que afirmaba que “si la dirigencia no toma medidas, costará mucho tiempo y mucha sangre erradicar las mafias del narcotráfico”. En ese sentido, el presidente de la Pastoral Social, monseñor Jorge Lozano, alertó en diciembre que “el narcotráfico y la trata de personas son actividades delictivas llevadas adelante por mafias del crimen organizado que van copando territorios e infectan con aprietes y sobornos diversas estructuras del Estado”.

Al difundir en noviembre de 2013 “El drama de la droga y el narcotráfico”, el presidente de la Conferencia Episcopal Argentina, monseñor José María Arancedo, cuestionó que se haya hecho “poco y nada” sobre el tema, y criticó la “ausencia del Estado” tanto para atender a los adictos como para desarticular a las “mafias”. En tanto, Lozano aseguró entonces que la Argentina corre el riesgo de tener una situación similar a la de México y Colombia, y que a esta “situación de desborde se ha llegado con la complicidad y corrupción de algunos dirigentes”. (DyN)

 

 

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