¿Puede seguir siendo Legisladora quien reivindica el secuestro, la desaparición, la tortura y el asesinato?

Una diputada de la UCR pidió «falcon verdes» para referentes de movimientos sociales.

La legisladora radical -y de Juntos por el Cambio- Patricia De Ferrari, emitió un mensaje por su red social pidiendo un «falcon verde» -el vehículo en que los militares desaparecían a personas durante la dictadura- para el abogado de Dolores Etchevehere, Juan Grabois.

Dolores Etchevehere y Grabois iniciaron un emprendimiento con trabajadores de un movimiento social por el cual cultivan hectáreas de un campo que se disputan fuertemente en la familia de terratenientes, los Etchevehere, y que desató una guerra mediática y judicial entre Dolores y su hermano, el ex ministro del macrismo Luis Miguel  Etchevehere.

La justicia no se expidió sobre la guerra de sucesión de los Etchevehere, pero un grupo de empresarios del campo junto a Luis Miguel Etchevehere rodean el predio y amenazan hasta de muerte a Dolores y al campesinado de base que trabaja esas tierras en la provincia de Entre Ríos.

En ese marco, la legisladora y vicepresidenta del comité central de la Unión Cívica Radical de la provincia de Córdoba -Patricia De Ferrari- emitió su opinión de la manera más violenta y en clara apología del delito:

Por mucho menos se aplicó sanciones y hasta se destituyó a diputados en el Congreso Nacional. Este escándalo no solo merecería una revisión de la aptitud de la legisladora para estar al frente de una banca de representación democrática, sino una acción penal que castigue tan tremendo acto argumentativo agravado por el contexto de violencia que se vive en torno al conflicto al que se refirió la diputada.

Nada menos que desde el partido que recuperó la democracia en Argentina luego de la cruenta dictadura militar de 1976-1983, y el partido que puso al presidente -Raúl Alfonsín- que enjuició a la cúpula de generales del genocidio.-