Salta. Militante de Derechos Humanos sale al cruce de los dichos del senador Durand

18/03/2022 | Revista Norte

«Una pena la de este chango, haciendo lo que su abuela nunca hizo, ni haría», expresó Riqui Zarra sobre los dichos de Emiliano Durand en la Cámara; discurso que el mismo senador autopromocionó.

El cantautor salió al cruce de la queja del senador Emiliano Durand que se expresó contra los piqueteros de Salta.

Riqui Zarra, militante de Derechos Humanos de la provincia, salió al cruce de las declaraciones del senador provincial Emiliano Durand; que hizo en la última sesión de la Cámara alta salteña quejándose por los cortes de ruta que protagonizaron distintas organizaciones sociales para manifestar su descontento por decisiones políticas del gobierno y otros reclamos de los más vulnerables.

El senador viajó a Orán para dar un curso y allí vio las protestas sociales de las que luego se quejó en su discurso en la Cámara, discurso que publicó mediante un video con musicalización épica en su portal de noticias.

«Emiliano Durand, desafortunado el decir semejante barbaridad sobre la gente que corta una ruta cuando venía a dar un curso de marketing o algo así. Llamar a gendarmería para que despejaran la ruta», comentó el cantautor y militante de Derechos Humanos oranense.

«Su abuela, la abu de Emiliano fue Lucrecia Barquet, es una de las más altas referentes de los Derechos Humanos en Salta. Ex presa política en la última dictadura, un faro para todos nosotros los militantes por los DDHH. Una pena la de este chango, haciendo lo que su abuela nunca hizo, ni haría», expresó Zarra.

Las manifestaciones sociales son una de las herramientas que tienen los pueblos para hacer valer su voz ante las decisiones del poder político y judicial que inciden en las vidas y el futuro de las personas y las comunidades. Esta vez se trataba de cortes momentáneos de ruta en defensa de derechos que sienten vulnerados.

Emiliano Durand, mas vinculado ahora con el conservadurismo salteño, «se tendría que haber bajado a hablar con la gente, a escucharlos», dijo Riqui Zarra; marcando una enorme diferencia con la talla de Lucrecia Barquet.

EL VIDEO AUTOPROMOCIONADO POR DURAND HASTA CON MÚSICA ÉPICA:

 

Lucrecia Barquet nació en la Ramada de Abajo (Tucumán) el 30 de noviembre de 1932. Pasó su infancia en Tucumán y Jujuy, su adolescencia y juventud en Misiones y Buenos Aires, donde finalizó sus estudios secundarios. A la edad de 19 años se radicó en Jujuy y en esa provincia comenzó su militancia en las filas de la Unión Cívica Radical del Pueblo. Allí nacieron sus tres hijos. En el año 1960 se trasladó a Buenos Aires. Allí durante tres años trabajó con el periodista y escritor Daniel Garibaldi, para el Diario “La Opinión”. En 1965 regresó a Salta y junto a su compañero, Mario Falco -reconocido médico neurocirujano-, continuó su compromiso social militando siempre en el campo popular. En 1966, durante la dictadura de Onganía, su familia sufrió persecuciones por razones políticas e ideológicas y su compañero Mario Falco fue encarcelado en la Central de Policía junto a otros militantes de la izquierda y el peronismo. A partir del Cordobazo participó activamente en las luchas reivindicativas y políticas que se desarrollaban en Salta, y trabajó sumando fuerzas y brindando apoyo a la campaña del médico desaparecido Miguel Ragone. Desde 1974, cuando la represión se profundizó de la mano de López Rega (padre de la Triple A) y comienzan los atentados y crímenes políticos a lo largo del país, su familia fue objeto de allanamientos, amenazas y persecuciones por lo que se vio obligada a abandonar esta provincia durante unos meses. En marzo de 1976 regresó a Salta, pocos días antes de la última Dictadura Genocida en Argentina. En abril de ese año fue detenida por un grupo que comandaba el entonces Jefe de Policía Gentil, responsable de crímenes de Lesa Humanidad. Una vez recuperada su libertad, viajó a Buenos Aires donde retomó su lucha por la vida y la libertad de los detenidos desparecidos y de los presos políticos y gremiales. Allí trabajó, durante tres años, con la Comisión Nacional de Familiares de Detenidos y Desaparecidos por razones políticas y gremiales, hasta su salida al exilio en 1979. Exiliada en Suecia, se integró a las organizaciones que en esos momentos denunciaba ante el mundo los crímenes de las Dictaduras Latinoamericanas. En 1980 decidió regresar al país para continuar apoyando las luchas que llevaban adelante los organismos de DDHH. En Salta comenzó la búsqueda de familiares de las victimas de la dictadura y junto a otras compañeras fundó la Comisión de Familiares en Salta. Desde esa Comisión encabezó el reclamo de juicio y castigo contra los genocidas; luchó sin claudicaciones por la recuperación de las libertades públicas, por la igualdad y la solidaridad entre los seres humanos. La llegada de la Democracia no detuvo su tarea y siempre estuvo presente en las manifestaciones, en las cárceles, en los juzgados, en los barrios, acompañando las luchas populares, al lado de los piqueteros, los transgresores, los marginados, los excluidos, defendiendo los derechos humanos. Fue una de las impulsoras de los juicios de La Verdad y de La Masacre de Palomitas, en Salta. Por su lucha en contra de la dictadura, se convirtió en una figura con reconocimiento a nivel nacional, por lo que en el año 2000 recibió un homenaje del Gobierno Nacional en el que se expresa: “En Argentina hay personas imprescindibles, Lucrecia Barquet es una de ellas”. El 10 de diciembre de 2002, la Universidad Nacional de Salta (a través de la Comisión de la Mujer), la Comisión de DDHH – ADIUNSa y el CUEH le realizó un homenaje “Por su lucha infatigable a favor de los Derechos Humanos”. El Instituto de Educación Media “Dr. Arturo Oñativia” de la Universidad Nacional de Salta le brindó un justo homenaje por su trayectoria. Su compromiso fue de por vida; la muerte la encontró trabajando en la compilación de los documentos que testimonian la represión en los años de plomo; el rescate de la Memoria fue una de sus últimas batallas. Lucrecia Barquet no sólo entregó su casa, su mesa, sus medios económicos a la causa por los DDHH, sino también sus días y noches sin tregua, su integridad moral, su valor, su verdad, su dignidad, su inagotable amor, su palabra compañera. – Reconocimiento de la Universidad Nacional de Salta por la labor, la vocación y convicción de lucha de la Sra. Barquet; realizado por el Consejo Superior de la UNSA al otorgar en su Primera Sesión Extraordinaria del 17 de marzo de 2005 el Título de “Doctora Honoris Causa” -post mortem- de la Universidad Nacional de Salta” a la Sra. Lucrecia BARQUET, en reconocimiento a su labor en defensa de los Derechos Humanos. Una distinción que otorga la institución a aquellas personalidades de sobresaliente trayectoria en el país o en el mundo, cuyo aporte sea significativo.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Maximum one link per comment. Do not use BBCode.

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.