Tensión en Inglaterra por la decisión del Presidente Correa sobre Assange

CASO WIKILEAKS

/ La suerte de Julian Assange está echada: Ecuador ya decidió sobre el asilo político /

El presidente Rafael Correa ya tiene la respuesta para el australiano, pero se anunciará mañana. Su canciller denunció que el Reino Unido amenazó con entrar por la fuerza en su embajada para capturar al periodista refugiado hace casi dos meses allí.

Mañana es el Día D para Julian Assange. A las 9 de Argentina, el australiano sabrá oficialmente si Ecuador le otorga o no el asilo político. Así lo anunció esta tarde el canciller de ese país, Ricardo Patiño, luego de reunirse por horas con el presidente Rafael Correa y otros funcionarios para tomar una postura frente al caso.

Con el pedido de asilo político, Assange busca evitar ser extraditado a Suecia, donde es requerido para ser interrogado por dos denuncias de supuesto abuso sexual. Pero el periodista y ex hacker asegura que es inocente y que el caso en realidad fue montado luego de que, a través de WikiLeaks, revelara miles de cables diplomáticos secretos de Estados Unidos y pusiera a ese país en el mayor ridículo internacional.

Si desde Suecia es extraditado a Estados Unidos, Assange cree que podría ser ejecutado. Para evitarlo, el australiano cuenta con los servicios del ex juez español Baltasar Garzón que el mes pasado se sumó para dirigir su equipo de defensa y le pidió a Ecuador que le otorgue asilo político.

Esta tarde, además de anunciar que mañana se conocerá la respuesta de Rafael Correa, el ministro de Relaciones Exteriores de Ecuador denunció que recibió un informe del Gobierno del Reino Unido que amenaza con tomar acciones para arrestar a Assange, que se encuentra desde el 19 de junio pasado refugiado en la sede diplomática.

Patiño advirtió que si los oficiales de Scotland Yard irrumpen en la embajada ecuatoriana en Londres, su país tomará acciones contundentes.

La comunicación oficial británica, dada a conocer hoy a la embajadora de Ecuador en Londres, Ana Albán, advierte que las autoridades inglesas «podrían asaltar» la sede diplomática en Londres, «si no se entrega a Julian Assange», señaló Patiño.

El canciller ecuatoriano calificó la posición británica como un «acto hostil e inamistoso» que viola «expresas normas internacionales».

Patiño tiene más que razones para creer en la amenaza británica: una decena de agentes de Scotland Yard fueron desplazados hasta la embajada de Ecuador en Londres y la rodearon.

La Policía británica puso a sus hombres frente a las puertas de la sede diplomática mientras el presidente Correa se encontraba reunido con sus asesores para tomar la decisión. Si el australiano pone un pie fuera de la embajada será automáticamente detenido.

En medio de un absoluto hermetismo, Correa se reunió hoy desde temprano en la sede del Ministerio del Deporte junto con su canciller, pero también con el procurador general del Estado, Diego García y el secretario de Comunicación, Fernando Alvarado.

Patiño le presentó los informes jurídicos y diplomáticos de la Cancillería sobre el pedido de  asilo político de Assange.

Pese al silencio que aún reina en Ecuador, el entorno político del mandatario y varios medios de comunicación, incluido el británico The Guardian que citó ayer una fuente oficial, aseguran que Rafael Correa recibirá con los brazos abiertos a Julian Assange.

Se basan también en que Patiño confirmó ayer que analizan cómo sacarlo de la embajada sin que sea detenido para poder llevarlo hasta un avión privado. 

Aunque Correa defiende la causa de WikiLeaks, no desea incomodar ni a Suecia ni al Reino Unido. Lo cierto es que Gran Bretaña también frenó el desembarco de su nuevo embajador Patrick Mulle previsto para agosto, en un claro mensaje de que las relaciones con ese país penden de la decisión que tome el presidente ecuatoriano.

 

 

Publicado por Clarín